@jaimito1996

martes, 31 de enero de 2012

La perla del Atlántico

 Madeira es un archipiélago de islas pertenecientes a Portugal que se encuentra en el medio del Atlántico, a 12 horas en barco de las Islas Canarias y a 1 hora y media de avión de Lisboa. Está constituida por Porto Santo, las Islas Desertas, que como su propio nombre indica están deshabitadas y Madeira, capital e isla principal, de la que voy a hablar.
 Mucha gente pensará que Madeira es un paraíso de playas al igual que otras islas del Atlántico como Fuerteventura o Cabo Verde. Si os disponéis a visitar la isla con esa idea olvidaos pues en Madeira sólo existen 2 playas: una pequeña cala llamada Prainha y una playa artificial con arena marroquí llamada Calheta. Ambas son tranquilas y en ellas se puede disfrutar de un buen baño en el mar pero no son ni mucho menos playas fantásticas.
 Madeira se caracteriza principalmente por su naturaleza. Es una isla de origen volcánico con múltiples acantilados, montañas, paredes de roca,... que harán que el turista vea imprescindible pararse en todos los miradores para observar las espectaculares vistas. Conducir por las carreteras de montaña de Madeira es una experiencia increíble. El mirador más importante se llama Cabo Girao y es el cabo más alto del mundo (589 metros).








 Bueno empezaremos a hablar acerca de las visitas y enclaves más bonitos de la isla. En primer lugar la capital es Funchal, situada en un valle junto al mar no destaca por algo individual pero su conjunto es bello. Es una ciudad plagada de parques y callejuelas adoquinadas con casitas pintadas de blanco. Su principal atracción es el teleférico que atraviesa toda la ciudad y te sube hasta el Monte que corona la ciudad. En él se halla la Iglesia de Nuestra Señora do Monte y los apreciados jardines botánicos.






 Empezaré a contarles pues cómo es la parte más occidental de la isla y el norte de ésta. Siguiendo la carretera hacia el norte, bordeando la costa encontrará el turista varios pueblos de pescadores como Cámara de Lobos, Ribeira Brava y Calheta. En éste último lugar se encuentra la playa artificial de arena marroquí, muy recomendable pero pasar un rato bañándose. Penetrando en el corazón de la isla aparecen las principales atracciones de la isla: las levadas, que son unas sendas y rutas a través de las montañas y bosques que siguen el camino que marca el agua que baja por las acequias. Son muy relajantes, tranquilas y asequible para cualquier persona. En mi opinión las más bonitas y espectaculares son la Levada do Risco e Rabaçal y la caminata por el Pico Ruivo.











 Hacia el norte de la isla están las piscinas naturales de Porto Moniz que se encuentran entre un conjunto de rocas junto al mar. Son muy divertidas para pequeños y no tan pequeños. En el norte de la isla seguiremos disfrutando del espectacular paisaje, mirando la carretera, parándose en los miradores y en los pueblos. Los más pintorescos son Santana, en la que están los Palheiros do Monte que son las típicas casas de Madeira; y Sao Vicente que se asemeja bastante a un pueblo colonial español en algúun país latinoamericano.






 Por último en la parte más oriental de la isla destacan el pueblo de Machico, un cristo sobre un acantilado similar al que observa Copacabana en Río de Janeiro y la Punta San Lorenzo donde se acaba la isla.
 Esto es  lo más reseñable de esta magnífica isla.
 Para acabar decir que Madeira también destaca por su gastronomía teniendo como platos más importantes la espetada (una enorme brocheta de carne), el pez espada y el atún; y una bebida llamada poncha que es un cóctel con limón, naranja y aguardiente de caña.
 Un saludo :)







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